En la primera aventura sobre
el paisaje de aprendizaje del cuento
“El pez Arcoiris”, Vaitiare nos
planteba un reto colaborativo que
debíamos superar si queríamos conseguir un punto y estar cada vez más cerca de
las gafas de buceo, primer elemento que necesitamos para poder sumergirnos en
el mar con ella y descubrir sus misterios.
Este reto pertenece al
proceso “Crear” de la taxonomía
de Bloom y relacionado con las inteligencias
lingüístico-verbal y lógica-matemática.
Se trataba de crear un juego entre todos con Tiny tap. Los peques se pusieron
manos a la obra, dejamos autonomía para que eligiesen qué juegos querían crear,
qué imágenes utilizar y también tuvieron que tomar decisiones y aceptar la
decisión de la mayoría.
Dentro de la aplicación también decidieron hacer un juego de sumas y lo hicieron al revés, es decir primero pusieron diferentes cantidades de peces y debían inventar la suma cuyo resultado fuese una de esas cantidades. Están hechos unas calculadoras humanas.
Una de las mayores ventajas que presenta Tiny tap es que nos permite crear nuestras propias clases dentro de la aplicación, asignar uno o varios juegos creando así una secuencia de aprendizaje. Podemos incluir como miembros de esas clases a todos nuestros alumnos, a cada uno de ellos les asigna un código QR que debe ser capturado desde la propia aplicación, para esto es necesario que las familias entren desde la opción “Inicio de sesión rápido del alumno”, esto nos permitirá posteriormente conocer el feedback recibido por el alumno cada vez que ha jugado y las veces que lo ha hecho. Así que contamos con la colaboración de las familias para iniciarnos en Flipped Classroom, algo que no les va a costar nada porque los peques estaban deseando poder jugar desde casa.
Otra de las maravillas de
Tiny Tap es que se puede jugar con los juegos creados desde la propia app
disponible para IOS
y ANDROID
sino que también podemos jugar desde el PC. Aquí dejo el juego para que
podáis jugar libremente.